Un estudio publicado en la revista JAMA Network Open el 20 de julio descubrió que la mayoría de los productos tópicos de CBD están etiquetados de forma inexacta y hacen afirmaciones terapéuticas que no están aprobadas por la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA).
De marzo a junio, John Hopkins Medicine estudió 105 productos tópicos de CBD (lociones, cremas y parches) de tiendas en línea y de tiendas físicas. «Cuarenta y cinco productos de 29 empresas se compraron en 7 tiendas diferentes en [Baltimore, Md., en julio y agosto de 2020], y 60 productos de 39 empresas se compraron en línea», según el estudio.
Según un comunicado de prensa de Hopkins Medicine, los «productos se analizaron utilizando una tecnología llamada cromatografía de gases-espectrometría de masas para identificar la cantidad real de CBD y THC que contenían».
De los 105 productos, 89 anunciaban la cantidad total de CBD en miligramos en la etiqueta, 16 contenían menos CBD del que se comercializaba, 52 tenían más CBD y sólo 21 estaban adecuadamente etiquetados, según el estudio.
«Las etiquetas engañosas pueden dar lugar a que la gente utilice productos de CBD poco regulados y caros en lugar de productos aprobados por la FDA que están establecidos como seguros y eficaces para una determinada condición de salud», dijo en el comunicado Tory Spindle, Ph.D., profesor asistente de psiquiatría y ciencias del comportamiento en la Escuela de Medicina de la Universidad Johns Hopkins y autor principal del estudio.
Según el estudio, los productos comprados en la tienda tenían una media del 21% más de CBD que el anunciado, y los productos en línea tenían una media del 10% más.
Los investigadores también descubrieron que 37 de los productos -10 comprados en la tienda y 27 en línea- contenían menos del 0,3% de THC delta-9, el cannabinoide que diferencia el cáñamo del cannabis. Aunque ese porcentaje está dentro del límite legal según la Ley Agrícola de 2018, solo 14 de esos 37 productos declararon que contenían menos del 0,3% de THC en la etiqueta -cuatro estaban etiquetados como «libres de THC», y 19 no tenían ninguna referencia al THC, según el comunicado.
Además, el estudio también descubrió que 29 de los productos hacían una declaración terapéutica, en su mayoría relacionada con la reducción o el alivio del dolor y la inflamación. «Quince (14%) hacían una afirmación cosmética/de belleza (por ejemplo, que aliviaban las arrugas o nutrían/mejoraban la piel) y 49 (47%) señalaban que no estaban aprobados por la FDA. Los otros 56 (53%) productos no hacían referencia a la FDA», afirma el comunicado.
«La variabilidad en el contenido químico y el etiquetado encontrado en nuestro estudio pone de manifiesto la necesidad de una mejor supervisión reguladora de los productos de CBD para garantizar la seguridad del consumidor», dijo en el comunicado el doctor Ryan Vandrey, profesor de psiquiatría y ciencias del comportamiento en la Escuela de Medicina de la Universidad Johns Hopkins y autor principal del estudio.